La bursitis es una inflamación que produce dolor y afecta a las bolsas sinoviales, también conocidas como bursas, que son pequeños sacos llenos de líquido que nos aportan una amortiguación en los huesos, tendones y músculos alrededor de las articulaciones.
Es frecuente que se presente en las rodillas o los codos, pero también puede aparecer en el hombro, la cadera, el talón y en la base del dedo gordo del pie.
Generalmente, el tratamiento se limita a descansar la articulación afectada y a protegerla de más traumatismos. En la mayoría de los casos, el dolor de la bursitis desaparece en unas semanas con un tratamiento adecuado.
Ahora bien, pero ¿qué produce la bursitis?
Causas de la bursitis
Una de las principales causas de la bursitis es la realización del mismo movimiento continuamente o de las posiciones que hacen que se presionen las bursas alrededor de una articulación, por ejemplo:
- Lanzar una pelota de béisbol o levantar algo por encima de la cabeza en repetidas ocasiones.
- Apoyarse sobre los codos por períodos largos de tiempo.
- Pasar mucho tiempo arrodillado para hacer trabajos como fregar pisos.
Asimismo, existen otras causas como las lesiones o traumatismos en las zonas afectadas o la artritis inflamatoria, como son la artritis reumatoide, la gota y otras infecciones.
Factores de riesgo
Cualquier persona puede sufrir de bursitis, pero existen ciertos factores que pueden aumentar el riesgo:
- La edad: la bursitis se hace más habitual con la edad.
- Las profesiones o los pasatiempos: el riesgo de sufrir esta enfermedad aumenta si tu trabajo o pasatiempo requiere de movimientos repetidos. Algunos ejemplos son poner alfombras, instalar baldosas o azulejos, realizar trabajos de jardinería, pintar o tocar algún instrumento musical.
- Otras afecciones: ciertas enfermedades y trastornos generalizados, como la artritis reumatoide, la gota y la diabetes, aumentan el riesgo de sufrir bursitis. Tener sobrepeso puede aumentar el riesgo de manifestar bursitis de cadera y rodilla.
Pero, ¿qué tipos de bursitis existen?
Tipos de bursitis
La bursitis se puede clasificar de dos maneras. En primer lugar, se encuentra la bursitis aguda y crónica.
- Bursitis aguda: puede desarrollarse en horas o incluso en días. Al mover o al tocar la parte inflamada la piel se enrojece y se hincha.
- Bursitis crónica: esta puede durar varios meses y aparece con frecuencia.Se produce cuando se dan episodios repetidos de bursitis aguda que no han sido resueltos o de traumatismos reiterados. La inflamación puede empeorar con la realización de ejercicios no habituales o de un esfuerzo excesivo.
Y la segunda forma de clasificar la bursitis es en función de su localización, las más comunes son:
Bursitis de cadera
El principal síntoma de esta es la concentración de dolor en la cadera que en general se extiende a la zona exterior del muslo.
Este tipo de bursitis es más habitual en mujeres y en personas de mediana edad o ancianos.
Bursitis de rodilla
Se trata de la inflamación de la bolsa situada cerca de la articulación de la rodilla.
Para reducir la inflamación es recomendable combinar unas prácticas de cuidado personal y la toma de tratamientos administrados por el especialista.
Bursitis de talón
La bursitis de talón, causa dolor en la parte posterior del talón y del tendón de Aquiles.
Este tipo de bursitis se suele dar principalmente en mujeres jóvenes, aunque también es habitual en los hombres. Los zapatos estrechos hacía el talón pueden llegar a provocar o empeorar la bursitis.
Bursitis de codo
La bursitis de codo es la inflamación de la bursa que se ubica en la parte posterior del codo. En ocasiones, es provocada por un apoyo prolongado de los codos sobre la mesa, traumatismos, uso excesivo del mismo o una infección en la bursa.
Bursitis de tobillo
La bursitis de tobillo es la inflamación de la bursa ubicada entre un hueso y un tendón del mismo. Las causas más comunes son las lesiones de tobillo, la presión sobre estos, el uso excesivo al caminar o el correr un tiempo prolongado, infecciones bacterianas, artritis reumatoide o gota.
Bursitis de hombro
La bursitis de hombro es la inflamación de la bolsa que recubre los tendones del manguito rotador en el hombro, es ocasionado principalmente por un proceso degenerativo del mismo llamado tendinosis.
Sin embargo, ¿cuáles son los síntomas de la bursitis?
Síntomas de la bursitis
Los síntomas más característicos que presenta la bursitis son el dolor y los signos de inflamación. Las articulaciones afectadas de las personas que sufren esta enfermedad pueden:
- Doler o sentirse rígidas
- Verse hinchadas y enrojecidas
- Doler más cuando la mueven o la presionan
Cuándo debes consultar a un médico
Si presentas algunos de los siguientes síntomas, consulta con un médico:
- Dolor en las articulaciones incapacitante
- Incapacidad para mover las articulaciones
- Fuerte hinchazón, enrojecimiento, hematomas o erupciones cutáneas en la zona afectada
- Dolor de carácter agudo o punzante al hacer ejercicio físico
- Fiebre
Pero, ¿cómo se trata esta enfermedad?
Cómo se trata la bursitis
Generalmente, la bursitis suele desaparecer sin necesidad de aplicar un tratamiento específico con hielo, reposo o anti inflamatorios. En el caso de que el doctor lo requiera tratará la inflamación desde su localización.
En ocasiones, cuando la situación lo requiere se procede a la aspiración del líquido o a la inyección de corticoides o anestésicos mediante infiltraciones. En algunos casos menos probables sería necesario realizar una cirugía.
Si crees que puedes estar sufriendo bursitis, desde Traumavance, te aconsejamos que pidas cita con un médico especialista para que valore y estudie tu caso.